Hoy quiero hacer una pequeña reflexión sobre lo importante que es crear y mantener un momentum en tu vida. Sin importar cómo estén las cosas en el mundo exterior, todo cambio comienza desde el interior. Recordemos unas sabias palabras que dicen que el éxito es 90% inspiración y 10% transpiración.
Al observar a la gente exitosa y las cualidades que tienen y cómo toman sus sueños y los convierten en realidad, veremos que se debe a que están constantemente construyendo y manteniendo un momentum en su vida, en sus proyectos, en sus negocios. Nunca pierden el entusiasmo, sin importar si fallan más de una vez, siguen buscando el camino hasta que encuentran el camino correcto. Son esas personas, las que mantienen su dedicación y compromiso con sus metas, las que logran el éxito e inspiran a otros.
Y construir momentum se trata de crear una gran bola de energía, como una bola de nieve que poco a poco va creciendo y que debemos mantener. Mirar nuestra vida y poner inteligencia y pasión en todo lo que hacemos. Invertir en nosotros mismos, en nuestra educación, en leer cada nuevo pedazo de información que nos interese y adquirir todo el conocimiento que podamos adquirir e implementarlo en nuestra vida diaria.
Todos tenemos metas, objetivos que queremos alcanzar. Y para llegar ahí tenemos que lograr crear y mantener ese momentum y esparcirlo hacia la gente alrededor nuestro.
Si estás en un proyecto nuevo, en un emprendimiento nuevo, en un estudio nuevo o lo que sea y estás emocionado y apasionado, no dejes que el momentum desaparezca. De lo contrario, volverás al nivel anterior en lugar de seguir avanzando. Tu momentum puede crecer de diferentes formas, a diferentes velocidades y volúmenes, eso no importa. Lo que importa es que lo mantengas y sigas avanzando al próximo nivel. Sólo así vas a llegar a lograr lo que quieres.
Así que comprométete con tus metas y tus deseos y sigue adelante. Aplica tus habilidades, aplica tus conocimientos y avanza!
Gracias por leer este comentario.
5 comentarios en “Creando y Manteniendo un Momentum en Tu Vida”
Carolina
cada vez me hago mas fanatico de tu sitio, gracias por el comentario lo necesitaba, aveces uno necesita de estos pequeños comentarias para darce cuenta que puede ser que este en el camino correcto o alomejor no…..pero no estoy perdido estoy dentros de esta globalizacion por decirlo de alguna forma, buscando los caminos que sean correcto para poder emprender algo que me realize como persona. muchas gracias por esto.
Saludos
Gracias Carolina por compartir esta importante reflexion que comparto plenamente. saludos desde venezuela y mucho exito. Gracias
bueno queria comentarte lo siguiente me gustaria aprender a hacer un blog te agradeseria mucho si puedes ayudarme con tu orientacion. Gracias.
Carolina, sinceramente, agradezco esta instancia en tu blog para leer este comentario e interactuar, más allá de la lectura, con mis palabras al poder responderte.
Es verdad, la verdad libera, has dado en el clavo con tu comentario sobre el «momentum», curioso término adoptado de mecánica clásica en física. Tal vez refleja bien el concepto expresado por tí.
Si, lo describes muy bien. Pero, debo agregar que, el «momentum» indicado por tí, es algo que siempre ha estado en diferentes filosofías y disciplinas por milenios tal vez: en Tai Chi se le tiende a llamar «equilibrio», en Aikido se le suele llamar «sincronicidad» y en diferentes otras disciplinas se les otorga nombres similares que tienen similares significados también. Cuando leí parte de la teoría de Coleman sobre «la inteligencia emocional», me dí cuenta que también Coleman describe ese estado. Coleman describe que un estado en que todo sale bien y que parece tener uno éxito y realizar las tareas y proyectos propuestos de manera fácil y correcta, dejando en el momento exacto de la consecución un sentimiento arrebatador, le denomina «estado de flujo». Como verás, existen varias maneras de llamar al «momentum» de una manera diferente, Coleman pretende explicar más técnicamente este estado, si se le compara con las filosofías de artes marciales o meditación.
Por supuesto que se habla de tener tiempo para uno mismo, pero ¿no es el tiempo de uno mismo personal, propio y único durante toda la existencia? Filosofar al respecto y converger en una idea que guste a todos, puede parecer una tarea difícil.
Recuerdo cuándo un primo me invitó a una clase de Aikido, en ese momento, me encantó, por primera vez, antes de dar 1.000 paradas como las típicas escuelas de Karate o Tae Kwan Do, hubo una clase que consistió en 70% de meditación. En ese momento, se realizó un trabajo de focalización. ¿Cómo despegarse del intelecto y dejar salir el instinto si somos entes racionales? Racionalizamos todo, incluso sabemos que si dejamos de respirar, moriremos. Este problema no lo tienen los demás animales (digo «demás» animales, pues el hombre también lo es). el observar a un animal es la misma escencia del Kung Fu, Tai Chi, Aikido: Ellos viven, no racionalizan su existencia.
Prosigo, la clase de meditación llegó a un momento peek, fue cuándo se desgajó la clase y el instructor indica que el hombre siempre piensa, dijo que se trataba esto de respirar con corazón, no entendí esto hasta que agregó lo siguiente: -En algún momento, uno siempre cuestiona la vida y comienzan las preguntas, ¿para qué estoy aquí?¿cuál es mi propósito en la vida?¿mi vida vale algo? Esta pregunta siempre es incómoda, molesta, lo que un maestro indica es que, cuando logramos entrar en un estado de «sincronicidad» (momentum, equilibrio, estado de flujo) con el universo, la pregunta deja de tener sentido-
Claro, explicó la problemática desde el punto de cista del Aikido, indicando el concepto «sincronicidad».
Si, aquello me quedó dando vueltas durante mucho tiempo, hasta que, lo comprendí viendo a mi perro. Al llegar a casa, todos los días, mi adorado perrito siempre me saluda y se pone alegre, no importa que lo pille dormido, que haga frío o esté caluroso, siempre se para y me hace un precioso show de bienvenida, incluso ahora que está un poco enfermito por su edad.
Eso, aquello, ese momento, esa acción, es la que hemos perdido, comprendí que siempre su reacción al llegar yo a casa sería la misma. El existe y actúa de esa manera sin pensar, su propia motivación es, simplemente «existir» o «ser».
Considero que el «momentum» expresado aquí es parte de eso mismo. Cuesta mucho meditar, darse un tiempo para uno mismo, con tanta problemática racional circundado siempre. Hay que sentir y actuar, sin olvidar que somos humanos. Eso es lo que nos conecta con nuestro ser interior.
Carolina, agradezco enormemente la oportunidad de este momento de comunicación en tu blog. Espero haber sido un aporte.
Te pones muy filosofica ahora… me parece muy bien… Y el comment de Claudio es bastante interesante tambien!
Ahora, cual es tu receta para mantener dicho momentum? Eso seria interesante…
Un abrazo!